...o un ex, dependiendo de nuestro género. Y no me refiero a una pareja; puede ser un ex-amigo; una ex-cámara de fotos; una ex-casa o un ex-lugar dónde nos gustaba estar. No voy a hablar mal de nadie ni a juzgar tiempos mejores. Estaba viendo fotos del pasado y aparecieron las del periódico. Aquél periódico regional en el que trabajaba los fines de semana para sustituir al titular. Esto fue por el 2002, a los 27 casi, cuando regresé de Madrid. Y me vino a la cabeza una muchacha, mi ex, que dio muchas vueltas hasta que lo fue. Coincidimos con 15 años, en segundo de BUP, y apenas nos mirábamos. Después no volví a saber de ella. A los 25 me fui a Madrid. Y un amigo, cierto día, me dijo que estaba saliendo con una muchacha de la ciudad, pero que vivía en Logroño. De no hablarnos apenas en el instituto (cada uno tenía su mundo), a ser íntimos 10 años después. El problema es que estaba casada... ¡qué fuerte! Y se quería separar. Y luego se ¿enamoró? de mi. Aunque a mi no atraía demasiado... pero supo engancharme. Antes de que eso ocurriera, me consiguió el trabajo este que comentaba de fotógrafo. Eso sí se lo tengo que agradecer. Después me dijo que me quería mucho, pero como amigo... una vez que me tenía enganchado. Y se fue a Córdoba. Entre los 25 a los 30 años, pasó de ser una desconocida a una gran amiga, para después salir cuatro meses, pelearnos, estar unos meses sin hablarnos y vuelta a empezar. A los 30 me puse novio y quería seguir siendo la mejor amiga mía... y de mi novia. a las 32 me cansé. Al igual que creo que se cansan todos los que la conocen. Al menos, es lo que a mis oidos ha llegado. Y desde entonces, dejé de contestarle mensajes y/o llamadas. A los 34 captó la indirecta y tengo casi 36... le ha costado entenderlo, la verdad. En fin, sólo quería explicar mis comienzos en la fotografía, y lo que me gusta fotografiar eventos deportivos. Es donde la gente muestra sus verdaderas expresiones, en esos instantes de tensión. Lo dejaremos para otro día. Porque todo lo ex- da para mucho, ¿no?
miércoles, 17 de noviembre de 2010
TODOS TENEMOS UNA EX...
...o un ex, dependiendo de nuestro género. Y no me refiero a una pareja; puede ser un ex-amigo; una ex-cámara de fotos; una ex-casa o un ex-lugar dónde nos gustaba estar. No voy a hablar mal de nadie ni a juzgar tiempos mejores. Estaba viendo fotos del pasado y aparecieron las del periódico. Aquél periódico regional en el que trabajaba los fines de semana para sustituir al titular. Esto fue por el 2002, a los 27 casi, cuando regresé de Madrid. Y me vino a la cabeza una muchacha, mi ex, que dio muchas vueltas hasta que lo fue. Coincidimos con 15 años, en segundo de BUP, y apenas nos mirábamos. Después no volví a saber de ella. A los 25 me fui a Madrid. Y un amigo, cierto día, me dijo que estaba saliendo con una muchacha de la ciudad, pero que vivía en Logroño. De no hablarnos apenas en el instituto (cada uno tenía su mundo), a ser íntimos 10 años después. El problema es que estaba casada... ¡qué fuerte! Y se quería separar. Y luego se ¿enamoró? de mi. Aunque a mi no atraía demasiado... pero supo engancharme. Antes de que eso ocurriera, me consiguió el trabajo este que comentaba de fotógrafo. Eso sí se lo tengo que agradecer. Después me dijo que me quería mucho, pero como amigo... una vez que me tenía enganchado. Y se fue a Córdoba. Entre los 25 a los 30 años, pasó de ser una desconocida a una gran amiga, para después salir cuatro meses, pelearnos, estar unos meses sin hablarnos y vuelta a empezar. A los 30 me puse novio y quería seguir siendo la mejor amiga mía... y de mi novia. a las 32 me cansé. Al igual que creo que se cansan todos los que la conocen. Al menos, es lo que a mis oidos ha llegado. Y desde entonces, dejé de contestarle mensajes y/o llamadas. A los 34 captó la indirecta y tengo casi 36... le ha costado entenderlo, la verdad. En fin, sólo quería explicar mis comienzos en la fotografía, y lo que me gusta fotografiar eventos deportivos. Es donde la gente muestra sus verdaderas expresiones, en esos instantes de tensión. Lo dejaremos para otro día. Porque todo lo ex- da para mucho, ¿no?
...o un ex, dependiendo de nuestro género. Y no me refiero a una pareja; puede ser un ex-amigo; una ex-cámara de fotos; una ex-casa o un ex-lugar dónde nos gustaba estar. No voy a hablar mal de nadie ni a juzgar tiempos mejores. Estaba viendo fotos del pasado y aparecieron las del periódico. Aquél periódico regional en el que trabajaba los fines de semana para sustituir al titular. Esto fue por el 2002, a los 27 casi, cuando regresé de Madrid. Y me vino a la cabeza una muchacha, mi ex, que dio muchas vueltas hasta que lo fue. Coincidimos con 15 años, en segundo de BUP, y apenas nos mirábamos. Después no volví a saber de ella. A los 25 me fui a Madrid. Y un amigo, cierto día, me dijo que estaba saliendo con una muchacha de la ciudad, pero que vivía en Logroño. De no hablarnos apenas en el instituto (cada uno tenía su mundo), a ser íntimos 10 años después. El problema es que estaba casada... ¡qué fuerte! Y se quería separar. Y luego se ¿enamoró? de mi. Aunque a mi no atraía demasiado... pero supo engancharme. Antes de que eso ocurriera, me consiguió el trabajo este que comentaba de fotógrafo. Eso sí se lo tengo que agradecer. Después me dijo que me quería mucho, pero como amigo... una vez que me tenía enganchado. Y se fue a Córdoba. Entre los 25 a los 30 años, pasó de ser una desconocida a una gran amiga, para después salir cuatro meses, pelearnos, estar unos meses sin hablarnos y vuelta a empezar. A los 30 me puse novio y quería seguir siendo la mejor amiga mía... y de mi novia. a las 32 me cansé. Al igual que creo que se cansan todos los que la conocen. Al menos, es lo que a mis oidos ha llegado. Y desde entonces, dejé de contestarle mensajes y/o llamadas. A los 34 captó la indirecta y tengo casi 36... le ha costado entenderlo, la verdad. En fin, sólo quería explicar mis comienzos en la fotografía, y lo que me gusta fotografiar eventos deportivos. Es donde la gente muestra sus verdaderas expresiones, en esos instantes de tensión. Lo dejaremos para otro día. Porque todo lo ex- da para mucho, ¿no?
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El tema de los ex no es de mis preferidos, con decir que sólo hay una persona a la que pueda definir como tal, y ya no existe para mí, está dicho todo.
ResponderEliminarMe alegro de que esa chica finalmente te dejara tranquilo. Y es que hay personas que no saben apartarse del camino de los demás, empeñándose en cruzarse para hacernos tropezar.
Un abrazo!
Pues menuda ex cargas a tus espaldas, querido. La verdad es que (espero no ofender a nadie) la chica resultaba ser algo así como una garrapata ¿no? de esas que se aferran y ya no es posible soltarse de ellas.
ResponderEliminarTodos tenemos ex, cierto. Lo mío más reciente es una pareja de ex-amigos que han conseguido enturbiar mi alma ya de por sí negra (pero durante breve espacio de tiempo, soy una persona fuerte y de fácil recomposición gracias a Dios)al despreciar y jugar con una amistad de muchos años atrás. La gente a veces tiene doble cara y actúa siguiendo impulsos (bajos en este caso).
Besos amigo
Los ex dan para mucho si te quieres poner a ello. Yo la verdad suelo pasar página. En el terreno de ex parejas, es verdad que algún que otro dio la lata y al final fue como el perro del hortelano… esos cuestan, ya te digo.
ResponderEliminarY ahora hablando de tus fotografías. Pues felicitarte y como dicen, “no hay mal que por bien no venga”. Al menos tú sacaste eso bueno.
Un beso
Zarzal, tampoco es que quisiera sacar el tema, fue surgiendo, y cuando me di cuenta, vi que daba para una entrada... y lo dejé así.
ResponderEliminarComo dices, lo mejor es dejar las cosas como están, y los ex, como si no existieran.
Un abrazo!
Akasha, ya durante la última fase, sólo "molestaba" cada 3 o 4 meses... lo importante era "ni comer, ni dejar comer". Pero sí, como dije antes, lo mejor es olvidar todo. Y seguir hacia delante.
ResponderEliminarCosas como las que cuentas, de los ex y las dobles caras, hacen que uno se vuelva desconfiado, siendo injustos con nuestra propia naturaleza de ser. Porque no soy desconfiado, pero con estas cosas te vuelven desconfiado, por nuestro propio bien... pero en realidad, me siento incómodo siendo desconfiado. Vaya, parece un trabalenguas, jeje...
Espero que tu alma esté ya tranquila y que no vuelvas a sufrir por los ex.
Un beso.
Gracias Anne por lo de las fotografías. Ya está todo dicho de los ex, ¿no? Lo has definido muy bien, como el perro del hortelano...
ResponderEliminarEn fin, quizá deba ser un trámite que la vida nos pone delante y que hay que atravesar. Y lo importante es que ya está atravesado.
Besos.
Hola Manolo, ¿nos tomamos un café?
ResponderEliminarLo digo, porque paso ya directamente de hablar del tema de los ex, lo que importa es el "ahora" y el "aquí", lo demás es una mera pérdida de tiempo, y como ya lo habéis dicho todo, pues eso...¿con leche o sólo? ;)
Besos!!!.
Hola Mayte... cuando quedamos para tomar café, siempre pido una infusión... que sea doble de tila jajaja. Cambié el look de las letras para que se pueda leer mejor, que hoy me lo pidieron, y no pretendo dañar la vista de nadie. Lo comento por comentar algo, para pasar de los ex... jejeje
ResponderEliminarBesos!!
Como curiosidad diré que conozco al espectador que mira atentamente la jugada tras la portería... casualidades de la vida.
ResponderEliminarJajaja... Arvydas, seguramente tenga muchas fotos donde conozcas a mucha gente, es lo que tiene esto, que al final tendré fichao a medio Linares, que tampoco es tan grande...
ResponderEliminarSaludos!!!