La mayor de las distancias es la ausencia de palabras. Y a veces, existe un rencor a corto plazo en las mismas. Aunque ese es otro tema. Siempre fui demasiado tímido para el beso, demasiado vergonzoso para el abrazo. Digamos que la palabra cauto siempre está presente en mi cabeza. Y eso hace que me muestre como soy. Hay personas que sólo valoran los besos. Craso error. Un beso obligado, por comprimiso o que no viene al caso no significa nada. Solo la incomodidad de tener que hacer algo que en ese caso no es para nada necesario. De pequeño, tartamudeaba cuando le hablaba a una chica que me gustaba. Jamás jugué a juegos de "adultos" de dar besos o tener contactos físicos, por pequeños que fueran, con ellas. Siempre ganaba la timidez. Conforme fui creciendo, el rubor se adueñaba de mi rostro y las palabras apenas me salían, los nervios se apoderaban de mi cuando un chica me decía algo. Me costó mucho vencer esto... si es que lo he vencido ya. De pequeño, cuando mi padre cumplía años, lo pasaba realmente mal. Esa mañana me hacía el "remolón" y procuraba que pasara el tiempo para que mi padre fuera olvidando la importancia de ese día. Ha habido años, no recuerdo la edad, que tras conseguir (sí, sí, conseguir con verdadero esfuerzo) decir "felicidades" he dado media vuelta ipso facto y he entrado al baño a secarme las lágrimas antes de que me las vieran caer. No es que no haya querido felicitar, es que muchos años, no he podido... qué queréis que os diga; cada uno expresa su timidez como el subsconsciente quiere. Los abrazos tampoco formaron parte de mi vida. Ese cariño que un abrazo otorga, ese bienestar, apenas lo he conocido. Hoy día, para mi un abrazo significa ánimo, apoyo y consuelo. Cuando abrazo a alguien no sé cuánto tiempo estar ahí, dejando pasar los segundos, quien debe dejar de abrazar... Valoro mucho un beso y un abrazo. Quizá por eso me cueste darlos. Me puedo seguir poniendo "colorado" si una chica que me gusta me besa a modo de saludo, si recibo un abrazo afectuoso y sincero porque en realidad lo necesite, si recibo un halago y sé que quizá lo merezca... el ponerse colorado siempre ha formado parte de mi vida, y lo seguirá siendo mientras exista. Ya sé que besar y abrazar es gratis... pero para mi, el dinero no es lo más importante de esta vida. Un abrazo para vuestros besos.
Hola manolo, ajora entiendo mejor tu comentario, la timidez puede ser una barrera que impide dejar fluir los sentimientos pero quizas hayas personas cercanas a ti que necesiten que los dejes fluir, que no lo pienses tanto y que pierdas el miedo al rechazo, no te preocupes todos lo tenemos y en grandes dosis.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y yo que pensaba que era tímido. Me has hecho sentir ridículo, Manolo, pero de una manera que me ha ayudado. La próxima vez que me encuentre en una situación de esas que no sé qué hacer por la vergüenza, me diré que soy un idiota. Ojalá pudiera decirte algo que te ayudara también. Gracias.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo!
Querido Manolo:
ResponderEliminarEl mundo está lleno de personas tímidas, lo que ocurre, és que jamás se presentan...
Te contaría infinitas anécdotas que he vivido y en las que he soltado esa maldita frase: ¡Tierra, tragame!
No encontrar el valor para hacer algo importante, y quedarte con esa impotencia y esa rabia, és muy duro.
Pero todo tiene un razonamiento lógico, eso te lo aseguro. Puedes ser siempre una persona que no levanta en exceso la voz, que jamás desea ser el centro de atención de ningún grupo o escenario, evitar un dialogo irremediable en alguna celebración, una entrevista de trabajo, una reunión.
Ser una persona de apariencia tranquila, y llevar dentro de tí una guerra constante, en la que luchas contra tí mismo, y de eso, nadie darse cuenta.
Las cosas pueden cambiar, no tirarte de cabeza a la piscina y comenzar a regalar abrazos por la calle al salir de casa...o sí, ¿porqué no?
Eres un tio cojonudo, con mucho que ofrecer, y me sería dificil creer que no adoras los abrazos, aunque te cueste darlos.
No és fácil cambiar los hábitos de una persona, ni las manías, aunque no se trate de ninguna de las dos cosas, pero, quizá ya vá siendo hora que te retes a ti mismo, y que impongas tu rebeldía, de la misma forma e intensidad con la que luchas contra las injusticias que te rodean y por las cuales nunca te silencias.
Sabes que tienes mi apoyo incondicional, pero de la misma manera que a mí me hubiese gustado que me lo dijeran en su momento, te lo digo a tí ahora. ¡Adelante, amigo, tu puedes!
No te mando un abrazo, voy a ser paciente y esperaré que encuentres el valor para que seás tú quien me lo dé.
Manolo, solo decirte que una vez más que te comprendo mejor de lo que crees. Siempre me he considerado una tímida enfermiza, de echo aún es hoy el día que alguien se dirige a mí sorpresivamente y los rubores adornan mi rostro. Gracias a este mundo virtual puedo expresarme todo lo bien que más o menos quiero, puesto que cara a cara me costaría un mundo. Siempre se me ha dado mejor la expresión escrita que la oral jejejje
ResponderEliminarTe cuento algo que quizás te ayude a conocerme y a comprenderme, como a mí lo ha hecho leer esta entrada tuya de hoy: durante mi niñez jamás JAMÁS mis padres me dieron un beso o un abrazo. Sonará disparatado, pero es así. NUNCA. Quizás ello me haya echo crecer un tanto fría y arisca pero al mismo tiempo (y de forma contradictoria) necesitada de afectos constantes. En la amistad busco siempre un contacto (que no necesariamente físico) pero al menos un saber que hay alguien que se preocupa por ti y te tiene presente en tu vida. ¡Ni qué decir ya en el amor!
Eso que cuentas de decir, por ejemplo :FELICIDADES, darse la vuelta y escapar corriendo al baño lo he hecho mil veces. Pero en mi caso era peor:cada vez que venía una visita me escondía debajo de la mesa y allí permanecía hasta que se iban, y si mi madre intentaba sacarme yo me aferraba a la pata de la mesa y no había tutía jajajajajjaja o me escapaba al campo y permanecía subida a las ramas de un árbol hasta que se hacía de noche y venían a buscarme.
¡ni te imaginas lo terrible que fue para mí la escuela a causa de mi timidez!
Te mando un beso, pero suavecito y que no te implique molestia alguna; y ya sabes aquí hay otra tímida que a su vez está encantada con tu timidez. Siendo como eres resultas un tipo genial, Manolo.
Ni soy un sabio ni lo parezco, es más me cuesta bastante aprender cosas que no tengan que ver con la experiencia. Pero una cosa si que se, es más duro arrepentirte de no haber hecho algo que de haberlo hecho. Lo hecho, en mayor o menor medida es rectificable, mientras lo que nunca hiciste se convierte en un “y si…”, que se une a otro “y si…”, pensamientos vanos que ocupan un espacio y un tiempo de reflexión inútil. Si haces algo que quieres, ya es algo, si te dan una hostia por haberlo hecho, es otro algo. Nada es nada y pensar en nada es absurdo.
ResponderEliminarPrefiero el dolor a la duda, la duda aunque la despejes, da pie a otra duda, y otra y otra.
Abraza sin miedo, sin pedirlo, es una muestra de afecto difícil de rechazar, pueden pasar muchas cosas, agradables o desagradables, pero habrás abrazado. El que abraza gana, si te responden ya ganan dos. En el caso de que no uno al menos ha abrazado.
Los besos que no son de amor o cariño son algo cultural, esos me la traen floja, besa a las personas que quieras, o si es un compromiso. Yo no lo suelo hacer. Es más, casi agradecen que no lo haga, jajajaja.
El beso que no comunica… Mejor dar la mano como Solchaga y Calvo Sotelo en la tele.
Yo beso a mi padre a mi madre y dos o tres más. Pero claro, yo soy un “raro”.
Si quieres a alguien besa y abraza sin esperar nada.
P.D.: Si recibes un abrazo porque lo necesitas, al menos que sea sincero.
¡¡¡Una abrazo!!!
Wen, la timidez me acompaña toda la vida y creo que seguirá siendo así. Los años que trabajé en la televisión, pensaba que iba a perder la timidez... no me veía con una cámara al hombro en mitad de mítines, reuniones, certámenes... ya sabes: "Mira, ha venido la tele!"... Y sin embargo, lo hice. Pero no perdí la timidez, seguramente perdí la vergüenza. O eso, o sin trabajo...
ResponderEliminarTampoco creo que sea miedo al rechazo, simplemente es que lo veo tan superficial algunas veces... y lo peor es que no se dan cuenta.
Un abrazo.
Zarzal, hay muchas formas de timidez. Quizá la vergüenza sea una de ellas, como dije antes, pero pero esa se puede vencer si existen causas de fuerza mayor. La timidez siempre está ahí. No hay que sentirse ridículo por nada. Yo sigo sintiendo vergüenza, timidez, corte... por muchas cosas. Imagina una estampa en la que unos enamorados se besan en un marco incomparable, un mendigo pide limosna en las puertas de un centro comercial, un anciano pasea apoyado en un bastón, un grafitero pintando una pared... son actos que me da mucha vergüenza fotografiar por si el fotografiado se enfada o me dice algo... y esos gestos, de tristeza, de pobreza, de esfuerzo, bien captados, se pueden convertir en grandes fotografías... pero no me veo.
ResponderEliminarComo ves, hay muchas formas de timidez.
Otro fuerte abrazo!!
Mayte, lo primero es mandarte un abrazo. Aunque reconozcamos que es más fácil escribirlo. A veces hasta me cuesta mandar un beso escrito o decir en una conversación telefónica eso de: "bueno, un beso..., adios". Me cuesta horrores, créeme.
ResponderEliminarValoro tus ánimos y tus palabras porque me siento comprendido, y eso para mi es muy importante. Has acertado de pleno con tu comentario. Nunca es tarde para animar a empezar a cambiar ciertas cosas que es posible que en nuestras vidas no gusten.
El miedo es que luego parezca irreal, que la gente diga que yo nunca he sido así, bla bla... y es todo lo contrario: la gente no ha sabido ver cómo soy, y el que ha sabido verlo, creo que no le ha importado porque he actuado de la manera prevista. Espero haberme explicado...
en definitiva, que intento retarme, es cierto, pero que suelo perder la batalla, también lo es.
Un abrazo... bueno, ya te lo envié antes. Pues dos :-D
Akasha... pensaba que yo era el único bicho raro que ha sufrido estos pormenores en su infancia. Y sigo "sufrido" por decir algo, porque tampoco era una cosa que te fueras a morir... pero sí que se pasaba ese mal rato de no saber qué hacer, cómo actuar... sin embargo, con visitas o familiares más lejanos no he tenido problema, ahí sí me dijeron que había que dar un beso a los titos y a las titas. Cuando uno ya tiene un poco de uso de razón es cuando se plantea el por qué de estas cosas y formalismos.
ResponderEliminarY ya que sacas el tema de la escuela... otro día comentaré cositas. Se me acumula el trabajo... jajaja. Tengo ya muchos temas pendientes.
Me alegra saber que me entiendes, igual que yo te entiendo a tí, y por qué no, reconozco que tu caso es aún más extremo, al menos en lo que cuentas comparado con lo que yo cuento. Pero no se trata de comparar. Te intuyo parecida a mi, con más nobleza y el alma más pura que la que decís que tengo yo...
Tampoco se me da bien piropear, que le vamos a hacer... un tipo genial. Suena bien. Y tú una muchacha genial. Te lo digo yo, que de timidez entiendo... aunque me ganes :-P
Otro beso, que nunca hay molestias en darlos o recibirlos.
Vic, cuanta razón tienes. La duda puede ser de lo peor que exista. Aunque ahora duda... ¿seguro que puede ser peor que algo mal hecho? Todo es según se mire. Esto es como el que quiere algo y sabe que el "NO" lo lleva por delante, pero lo intenta todo por si acaso lo consigue... no tiene nada que perder.
ResponderEliminarCon la timidez parece que puedes perder hasta la vida, así somos los tímidos, y a pesar de todo, sabiendo que el mundo no se acaba actuemos como actuemos, la timidez termina ganando. Iba a poner algunos ejemplos, pero no quiero hacer comparaciones.
Akasha comenta que en su niñez, jamás recibió besos de sus padres... y yo creo recordar que mi caso es parecido. Pero es que no son necesarios, ni lo han sido. No me ha hecho falta un beso de mi madre cuando me he ido o cuando he vuelto a casa, cuando llegaba de clase, o me iba al colegio... para saber que mi madre me quiere, me va a echar de menos el rato que no estoy o se va a acordar de mi durante mi ausencia.
Si algunos hijos/padres se besan por liberar esa conciencia, me parece de lo más falso. Si un hijo/a besa a sus padres porque le deben la vida o algo así, igualmente, me parece de lo más hipócrita. Y no soy un desagradecido. Al contrario. Pero hay otras formas de hacer las cosas... no sé si me explico. Comerse a besos a una madre y luego discutir con ella por cualquier tontería o no preocuparse de ella durante una semana, son besos "lavaconciencias", como digo yo...
Un saludo.
Manolo no es malo ser tímido.
ResponderEliminarYo la verdad no soy de muchos besos ni abrazos.
Aunque si tengo que elegir me quedo con los abrazos.
Soy la más huraña de la familia. Pero no puedo evitarlo.
A mí lo que me da más coraje es que me noten que me está dando vergüenza, porque me pongo colorada.
Pero sí que he aprendido con el tiempo que reconforta mucho el cariño, expresado en besos y abrazos, y que cuando empiezas a soltarte un poquito, cada vez te cuesta menos.
Besos y abrazos
¿no te he dicho que soy tímido hasta morir?, jejeje.
ResponderEliminarPero a veces es o la timidez o tu.
Me gusta mucho este debate, yo soy muy timida y además vergonzosa pero al igual que tu Manolo y casi siempre por razones de trabajo lo voy manejando para ello es muy útil el tema de las habilidades sociales que te sacan de cualquier apuro.
ResponderEliminarEsta timidez, por supuesto, no es tan marcada cuando tengo confianza, soy cariñosa y agradezco mucho cualquier muestra de cariño, tanto que me nutre más que el pan aunque luego discuta con esa persona, no importa no son besos de conveniencia, supongo que cuando te hablas de este tema te refieres a ser cariñoso solo por el mero afan de sacar algo a cambio pero vaya eso no tiene que ver con el cariño, es otra cosa.
Estoy de acuerdo en que la mayoría de los tímidos se expresan mejor por escrito que en directo, yo sin ir más lejos, seguro que si os viera me quedaría super cortada pero lucharía contra ello y ya pasado un rato me iría relajando :)
Besos y abrazos.
Os propongo una quedada en persona, pero acordaros de traeros un bolígrafo y papel para anotar lo que queramos decir, eso o aprendemos a ser mimos y gesticulamos con nuestras expresiones faciales jajajaja
ResponderEliminarYa te dije Manolo, que las personas tímidas abundan, ¿lo ves?
Volviendo al tema de los besos y abrazos, a pesar de no saber expresarme con palabras, pués me ruborizo con facilidad, me encanta el contacto físico, pero ojo, con la gente que aprecio, porque con los desconocidos me da cierta grima que me soben. Soy muy cariñosa y me gusta demostrar a la gente que quiero, que las quiero, porque con la voz no me sale.
Como dice Wendy, el trabajo és un lugar donde se aprende a superar este medio, a mí me sirvió a la fuerza, porque donde trabajaba había más de 10.000 personas, y todos los días tenía como mínimo, hablar con unos 20, 30 y hasta cuarenta personas, y sino en las reuniones. Una vez mi jefe de equipo, sabiendo el mamón lo tímida que soy, me hizo hablar para todos una de sus notas acerca de no se qué, y encima con palabras en ingles, mi cara tomó el color de la fresa madura, si si, creo que me salieron hasta las pepitas jajajja
Ahora me río, pero en su día, cuando cogí a mi jefe de equipo a solas, le dije hasta del mal que se tenía que morir, a modo de cachondeo claro, nos llevabamos genial, y todo ese proceso como digo, me ayudo muchísimo.
és cuestión de decir, !!!hasta aquí!!!
Pero sigue dandome pánico hablar en público eh, solo que, lo disimulo con una enorme sonrisa :)
Besos y abrazos a tod@s!!!.
Hola Anne... soy tampoco soy de muchos besos o abrazos... fíjate que cuando voy a ver a mis padres, a lo mejor después de 3 o 4 semanas sin verlos, y entro por la puerta y digo un "Hola que tal!!" pero no voy corriendo a dar un beso ni nada... en las despedidas, igual, a veces me voy sin dar dos besos jaja... pero sé que ellos no se enfadan, siempre ha sido así.
ResponderEliminarY no creo que eso sea ser huraño, la verdad. Simplemente es como somos. Nada más. No tiene nada que ver con el cariño.
Besos!!
Tienes razón, Vic, a veces es la timidez o uno mismo... pero sabemos sobrevivir con ello. Por eso, a veces, nos tachan de "dejados"...
ResponderEliminarOtro abrazo.
Wendy, precisamente, mientras voy contestando, pensaba que tenía que decir algo así como "la mayoría de blogs son de personas tímidas"... pero luego lo he pensado, es una forma de encasillar a la gente, y además no creo que sea cierto.
ResponderEliminarComo bien dices, aquí es fácil expresarse y perder la timidez. Eso nos ayuda. Por otro lado, la confianza, para mi, es fundamental, pues si alguien no me otorga confianza no puedo romper la barrera de la timidez con esa persona, y no le cuento cosas que quizá me vendría bien para desahogarme... Y creo que son dos términos muy ligados: confianza y timidez. Una vez consigues confianza, la timidez desaparece. A mi me suele pasar. Pero también resuta muy difícil coger confianza, es algo que la gente se muestra reaccia a otorgar...
Más besos y abrazos!!
Mayte, lo de hablar en público... ese es otro tema, jajaja... se entiende que cuanto menos mejor, y te lo dice alguien que también ha sido profesor, casi tres años... pero volvemos a lo mismo: se trata de trabajo. Además, eran grupos reducidos, de 12 personas como mucho, y terminaba cogiendo confianza, como dice Wendy, y ya la cosa cambia... lo difícil era romper la barrera de los primeros días.
ResponderEliminarYa me doy cuenta de que abundan las personas tímidas. Me consideraba un bicho raro pero veo que no, que hay de todo en esta vida.
Gracias por vuestros mensajes y participación. No pensaba que este post iba a estar tan animadito...
Besos!!
Por cierto nádie ha dicho nada de la propuesta de mayte, a mi me parece buena idea ¿nos animamos?
ResponderEliminarmanolo, yo te ofrezco mi confianza por sí te hace falta aunque algo medice que no la usarás porqueigaul te da muuuchoooo corte jejeje, vamos a desengrasar un poquito.
Besos.
La verdad es que hacía tiempo que no escuchaba/leía esa palabra... quedada, o kdd en mis tiempos mozos (como si hace 10 años fuera joven...). He estado en alguna quedada y, sinceramente, desde el primer momento en que ves a esa persona que conoces/chateas/escribes/lees por la red se rompe una magia existente justo hasta ese momento. Aparte de eso, ni me parece mal, ni bien... me parece más que nada difícil. Todos trabajamos o tenemos cosas que hacer, habría que buscar fecha en la que todos tengamos libre, un lugar... harto complicado, la verdad. Pero jamás me negué a las quedadas de los amigos de internet. De hecho, fui a Bilbao una vez y lo pasé genial (yo vivía en Madrid, y por aquél entonces no conducía y me recogieron otros que iban desde Sevilla... ).
ResponderEliminarGracias Wendy por tu confianza, y bueno, ya que lo has dicho, yo he opinado, y lo dejo en el aire...
Saludos!!