Tus ojos sirven para mirar. Sin embargo, me miras con el corazón. Tus oídos te ayudan a escuchar. Y me escuchas con la razón. No tengo alas y a veces... puedo volar. Camino cuando mis pies no quieren caminar. Te sueño en aquel lugar en que nunca hemos estado. Nunca mi amor la mentira puede negar, ni a contracorriente, intentar nadar. Porque la orilla no está en alta mar, y mis aletas las quisiste cortar. Contigo, las nubes pude tocar. La luna se negó a mirar cuando el sol quiso susurrar tu nombre. Supiste abrir con la llave de mi ser la puerta de la vanidad. Por la ventana se escapa el viento que, una vez libre, pierde su libertad. Existen lugares eternos donde el tiempo corre, sin parar, sin pensar en nadie. Narciso. Sólo se quiere a sí mismo. Jamás permitas a tu belleza naufragar. Se puede ahogar en cada suspiro que me quitas, para así poder respirar. Pero ahora que recuerdo... nadie se ahoga en el agua de tu querer. Quizá no posea un alma pura de escritor. Pero siguiendo tu camino, llegué a un lugar todavía por inventar, de casas blancas y ventanas y balcones azules. Un lugar que no existe para quien no ha estado allí. Mientras no hayamos tenido constancia de algo, seguramente, estará por inventar. Que nuestro fuego, aún está por apagar. Y si uno no quiere, el otro no puede. Por mucho que soples...
Cuando intenté publicar el comentario se me petó el ordenador y he tenído que reiniciar jejejje.
ResponderEliminarTe decía que la foto me recuerda a Mojacar con sus casas azules y blancas, sus calles empinadas, sus balcones llenos de flore, un pueblo colgado sobre el mar.
Si las alas se cortan y no se puede volar se puede llegar a la zozobra auqnue hay veces en que vale la pena cortarselas.
Muy bueno tu escrito.
Un beso.
Querido Manolo, hoy quiero agradecer a tu pluma estas palabras que nos traes, me saben tan hondas, tan llenas de amor, son realmente preciosas, y no soy cortés al decirtelo, soy sincera.
ResponderEliminarTienes un alma poeta, porque en tu corazón hay un lugar inquebrantable que ninguno ha sabido descubrir; está lleno de calles mojadas por la lluvia de abril, adornado por guirnaldas de fuertes colores, se bañan en charcas plateadas donde la luz deja a remojo sus recuerdos de luna llena, y el sabor de la fruta fresca que empapa tu boca, y deja en ella, el sabor más aliviado a todas tus penas.
Hoy te sentí cercano y lejos a la vez, mudo y gritando sin decoro...¡¡¡estoy vivo!!!
Gracias por sentir, y por darme el placer de leerte y descubrirte cada día un poquito más.
Un fuerte y cálido abrazo, amigo.
Vaya, Wendy, siento que el ordenador te jugara esa mala pasada... a mi también me ha pasado a veces. Queda mucho para que la tecnología sea perfecta.
ResponderEliminarLa foto es de un pueblo de Túnez. La verdad es que fue una pasada, todo el pueblo blanco y azul, nunca he visto nada igual... en Mojácar también he estado, a ver si un día pongo alguna de Mojácar.
Gracias por los cumplidos. A veces, se echa de menos el mar. Creo que vivir cerca del mar, caminar por la orilla, debe ser toda una terapia para corazones tristes...
Besos.
Hola Mayte. No hay nada que agradecer. Al contrario, agradecer yo a vosotros vuestras lecturas y vuestros halagos.
ResponderEliminarSólo intento cumplir un sueño, escribir, e intentar escribir bien. No se me da muy bien la poesía, se me da algo mejor rimar. Pero todo lleva un proceso de aprendizaje, todo es ponerse y poco a poco iremos mejorando. Es la sensación que voy teniendo, tras más de un año que llevo escribiendo en el blog, me siento algo más preparado para escribir cosas, expresarme, narrar historias, crear relatos. Y eso es importante, porque vosotros lo valoráis y sabiendo que sois sinceros, me da mucho ánimo el seguir hacia adelante.
Tu propio texto de respuesta es bastante más bonito que lo que yo he escrito, mientras lo leía he sentido como que era la continuación de mi texto, lo que he sido incapaz de escribir, el final de la historia, el complemento de mis palabras. Y también te soy sincero.
Así que gracias a ti también. Sé que estoy aprendiendo mucho de todos vosotros.
Besos.
El mundo está lleno de palabras, todas ellas alcanzables a nuestras manos y nuestros sentidos, solo debes de tomarlas y cuidarlas con mucho mimo, ellas solas se sabrán colocar en papel blanco.
ResponderEliminarNo és tan necesario saber pulir una técnica, aunque no haya que descartarse tampoco esa instrucción, pero lo que impera sobre todas las cosas, és la lucidez de tu mente, la explosión de todo tu sentir, y saber que puedes alcanzar el milagro, ese milagro no és otro que tener la valentía para derribar los míedos que frenan nuestra inspiración.
Yo escribo porque no pierdo nada al hacerlo, que no temo jueces ni viene en mí impuesta ninguna obligación altanera donde resida la codicia y el escalar peldaños por ganar algo. Cuando escribo, siempre gano, solo la íntimidad de las palabras y mi presencia, és la única claúsula que necesito se respete.
Un abrazo grande, Manolo.
“Me miras con el corazón”…
ResponderEliminarY así podría ir sacando frases y frases que son muy bonitas.
Sinceramente creo que los textos que más llegan son aquellos escritos desde el corazón.
Me pasa algo parecido a ti, quiero escribir y cuando releo las palabras que salieron, pocas veces me gustan. Pero es mi forma de expresarme y estoy aprendiendo a respetarla.
Yo no sé muy bien cómo son las “almas puras de escritor”, aún no he visto ninguna, pero te felicito por este texto cargado de “alma”.
La foto me recuerda a Mykonos.
Un beso
Mayte, creo que has dicho algo muy importante: que escribes porque no pierdes nada al hacerlo. Así fue como empecé yo y por lo que me decidí a iniciar este camino y ya ves... no sé dónde está el final, pero tampoco tengo prisa por llegar, ni me lo planteo...
ResponderEliminarGracias por tus ánimos. Para mi, todas vuestras palabras son ánimos.
Besos.
Hola Anne... la foto es de un pueblecito de Túnez. No sé si lo comenté antes... Tienes toda la razón, los textos que más llegan son los que se escriben con los sentimientos del corazón. Como bien dices, prefiero no releer los textos, aunque me veo obligado a hacerlo para evitar las faltas de ortografía, que aún así se suguen colando de vez en cuando.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tus felicitaciones. Como he dicho antes, me sirven de ánimo. Gracias.
Besos.
Jo, Manolo, me has dejado hecho polvo. Realmente bello, y lleno de verdad, se nota que hablas con el corazón, y que éste está sufriendo por amor, de ese que no se puede borrar de un plumazo.
ResponderEliminarUn abrazo!
Gracias Zarzal. Sufrir sufre, quizá no por amor, aunque seguro que éste tiene gran parte de culpa. Nos empeñamos en hacer las cosas tan difíciles, cuando en realidad son bastante sencillas. Creo que ya lo he dicho muchas veces.
ResponderEliminarEn fin, que sigue habiendo rachas y creo que seguirá habiendo de por vida...
Un abrazo!
Me quedo sin palabras, solo se decir ¡¡¡PRECIOSO!!!
ResponderEliminarHola Nieves!!
ResponderEliminarMuchas gracias por los halagos. Valoro muchísimo todos tus mensajes, te lo digo sinceramente. A veces me doy cuenta de que has dejado un mensaje 3 o 4 días después de yo haber escrito la entrada, cuando ya tengo otras dos delante, y ya se me pasa contestarte o decirte algo, pero bueno, sé que contigo no es necesario responderte, sabes que siempre te leo y te agradezco de corazón tu apoyo.
A mi madre le pasa igual, ya le he dicho muchas veces que me escriba algo, pero nunca lo hace... pero para mi lo importante es que sé que siempre me lee.
Valoro mucho todo lo que haces, Nieves, ya lo sabes... Un abrazo.