LA TRISTEZA SE VISTE DE CIELO
La tristeza se disfraza de azul y se viste de cielo anaranjado amargo. Sólo nos queda seguir nuestro camino y continuar intentándolo sin desfallecer un sólo instante. Instante que se convierte en eterno cuando no llega la ansiada noticia, instante que se convierte en centésimas de segundo cuando escuchas lo que no quieres escuchar, tiempo inversamente proporcional a la distancia que transcurre entre la negación y la asimilación. Ni todo se arregla rezando ni nada se soluciona obrando de buena fe. Si acaso, obrando con cierta esperanza, esperando a que la suerte, la simple suerte, decida. Nos guste o no. Aquél deseo se transforma en una forma de soñar, en una manera de sentir algo, sentir que lo que se hace es todo lo que está en nuestras manos, y lo demás... debería decir "Dios dirá". Bueno, eso que lo digan los demás. Mi abuelo solía decir que todo tiene solución menos la muerte. Efectivamente, así lo creo yo, que todo tiene solución mientras permanecemos en esta vida. Lo malo es que la muerte nos suele pillar antes de que encontremos dicha solución. La tristeza se viste de cielo, mi tristeza se disfraza de azul, y el pesimismo aparece de color naranja. Y esto es igual para todos que tenemos dicho cielo bajo nuestras cabezas. Pero mientras hay vida, hay soluciones.
La tristeza se disfraza de azul y se viste de cielo anaranjado amargo. Sólo nos queda seguir nuestro camino y continuar intentándolo sin desfallecer un sólo instante. Instante que se convierte en eterno cuando no llega la ansiada noticia, instante que se convierte en centésimas de segundo cuando escuchas lo que no quieres escuchar, tiempo inversamente proporcional a la distancia que transcurre entre la negación y la asimilación. Ni todo se arregla rezando ni nada se soluciona obrando de buena fe. Si acaso, obrando con cierta esperanza, esperando a que la suerte, la simple suerte, decida. Nos guste o no. Aquél deseo se transforma en una forma de soñar, en una manera de sentir algo, sentir que lo que se hace es todo lo que está en nuestras manos, y lo demás... debería decir "Dios dirá". Bueno, eso que lo digan los demás. Mi abuelo solía decir que todo tiene solución menos la muerte. Efectivamente, así lo creo yo, que todo tiene solución mientras permanecemos en esta vida. Lo malo es que la muerte nos suele pillar antes de que encontremos dicha solución. La tristeza se viste de cielo, mi tristeza se disfraza de azul, y el pesimismo aparece de color naranja. Y esto es igual para todos que tenemos dicho cielo bajo nuestras cabezas. Pero mientras hay vida, hay soluciones.
ESPERO QUE ESO QUE DESEAMOS LLEGUE ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE...
ResponderEliminarTu abuelo tenia razón, mientras hay vida hay esperanza.Intenta no perderla nunca.
ResponderEliminarSimplemente...llegará...lo sé
ResponderEliminarLa ESPERANZA SE VISTE DE UN VERDE CIELO