Volvemos a la normalidad. A pesar de estar comenzando el fin de semana. La razón hará que volvamos a ser razonables con nuestros tiempos. La desazón hará que volvamos a estar poco animados con la monotonía de la rutina diaria. No sé el humor que tendré, que tendremos, una vez pasadas estas fechas que parecen interminables pero que, al final, terminan, como todas las épocas. Afortunadamente, este año queda más lejos de lo habitual la Semana Santa. Mejor así. De esta forma tendremos más tiempo para las cosas normales de la vida. Buscamos la soledad inconscientemente. No me puedo quejar de estos días. Pero en realidad creo que me estoy volviendo algo anti-social. No sé si es el estado de ánimo, si cada vez prefiero estar más tiempo sólo o si simplemente es que me estoy acostumbrando a esa soledad. Pero cuando quiero estar con mis amigos o con mi gente y llega ese momento, me entra como pereza. Me quiero encerrar y no sé quien tiene mi llave...
Hola de nuevo, mi querido Manolo.
ResponderEliminarVuelta a la normalidad, como bien has dicho, que por una parte ya iba siendo hora, correr nunca ha sido mi fuerte, y estas fechas como que impulsaban a ir a destiempo, comprar, estar, saber, comer y demás, todo a contrareloj.
Yo prefiero la normalidad, la tranquilidad y en muchas ocasiones estar sola, así que te comprendo bastante, y no creo, aunque para muchos sea así, que la soledad sea algo malo.
Jamás me sentí y conocí mejor que cuando me sentía a solas conmigo misma, en mi espacio, manejando y explorando mis pensamientos e inquietudes sin tener que compartirlas ni conversar con nadie.
No se trata realmente de que te vuelvas antisocial, a mí en mas de una ocasión me tacharon de eso, pero hice oídos sordos y reafirme la sabiduría de que no erramos cuando nos encerramos en nuestra soledad, cuando, muchas veces me he encontrado a personas que sólo saben hacer que hablar y hablar, sin sentido, sin base, sin fundamento, con total desconocimiento del ser húmado, comenzando por él mismo.
Yo siempre preferí escuchar a ser escuchada, las letras me sirvieron en muchos casos como puente de diálogo, imagino que a tí también.
Por cierto, que no te he felicitado el año nuevo ni el día de reyes, pero sabiendo un poquito como eres...sólo te diré que espero que esté todo bien en tu vida, que te encuentres mejor, y que tu señora madre María, siga tan orgullosa de tí como lo estamos nosotros.
Cuando sientas bajo tu estado de ánimo, no dudes ni te preocupes si necesitas estar a solas, ver una pelicula, escribir, escuchar música, mientras tus amigos funden los fusibles de tus telefonos, tanto el del timbre como el del móvil; deja el tiempo correr, éste es sabio siempre, y sabrá devolverte al camino cuando así lo crea conveniente.
Te mando uno de los más grandes abrazos que te puedo dar, uno con aroma a Enero, con pequeñas pausas y grandes esperanzas de que vuelvas a sentirte mejor pronto.
Hola May!!
ResponderEliminarMe alegro de que estés/estéis de vuelta por aquí. Aunque en verdad, lo único importante es que seáis felices ;-) Se os echa de menos, pero si es por una buena causa... Creo que, como voy dejando entrever en mis últimas entradas, voy a ir haciendo cosas que llevo tiempo meditando y que hay que ponerse manos a la obra con ellas. Que los sueños se pueden cumplir y nunca es tarde si la dicha es buena.
El 2011 puede ser un buen año. Así lo deseo para ti y por supuesto para todos los tuyos. Y deseo que los Reyes te hayan dejado de todo lo mejor.
A mi, aparte de un nuevo dolor de riñón la misma noche de Reyes... jejeje... pero se lleva bien.
Otro gran abrazo para tí.