Anoche observaba, con cierta quietud, con apremiante mesura, la sombra de tu perfume. Mi cabeza descansaba en la almohada de tu ternura. Dulces letras rellenas de los más esperados pensamientos. Ninguna de mis esperas supo tener paciencia de ciego. Si contigo siento tu ausencia, sin ti miento tu presencia. No hay peor ayuda que la que no se pide; sólo creo en la ayuda que me ofrecen previo entendimiento, previo razonamiento agradecido. Con una sonrisa en los labios. Con los labios de las cosquillas donde pinté mis sueños. Mis sueños... siempre anhelados, queriendo esperarlos sin esperar nada a cambio. Quién pudiera comprender que mis sueños no son sólo míos... que además de míos, son de los demás, que pertenecen a mi ser, a mis ilusiones, que no debieran existir impedimentos para que pudieran ser entendidos. La barrera de la felicidad, el tapón de la libertad, el cortafuegos de la incomprensión... más fácil de comprender no puede ser. Tampoco estoy pidiendo una fórmula tan complicada, como la de la misma coca cola...
sábado, 8 de enero de 2011
FÓRMULAS IMPOSIBLES
Anoche observaba, con cierta quietud, con apremiante mesura, la sombra de tu perfume. Mi cabeza descansaba en la almohada de tu ternura. Dulces letras rellenas de los más esperados pensamientos. Ninguna de mis esperas supo tener paciencia de ciego. Si contigo siento tu ausencia, sin ti miento tu presencia. No hay peor ayuda que la que no se pide; sólo creo en la ayuda que me ofrecen previo entendimiento, previo razonamiento agradecido. Con una sonrisa en los labios. Con los labios de las cosquillas donde pinté mis sueños. Mis sueños... siempre anhelados, queriendo esperarlos sin esperar nada a cambio. Quién pudiera comprender que mis sueños no son sólo míos... que además de míos, son de los demás, que pertenecen a mi ser, a mis ilusiones, que no debieran existir impedimentos para que pudieran ser entendidos. La barrera de la felicidad, el tapón de la libertad, el cortafuegos de la incomprensión... más fácil de comprender no puede ser. Tampoco estoy pidiendo una fórmula tan complicada, como la de la misma coca cola...
Anoche observaba, con cierta quietud, con apremiante mesura, la sombra de tu perfume. Mi cabeza descansaba en la almohada de tu ternura. Dulces letras rellenas de los más esperados pensamientos. Ninguna de mis esperas supo tener paciencia de ciego. Si contigo siento tu ausencia, sin ti miento tu presencia. No hay peor ayuda que la que no se pide; sólo creo en la ayuda que me ofrecen previo entendimiento, previo razonamiento agradecido. Con una sonrisa en los labios. Con los labios de las cosquillas donde pinté mis sueños. Mis sueños... siempre anhelados, queriendo esperarlos sin esperar nada a cambio. Quién pudiera comprender que mis sueños no son sólo míos... que además de míos, son de los demás, que pertenecen a mi ser, a mis ilusiones, que no debieran existir impedimentos para que pudieran ser entendidos. La barrera de la felicidad, el tapón de la libertad, el cortafuegos de la incomprensión... más fácil de comprender no puede ser. Tampoco estoy pidiendo una fórmula tan complicada, como la de la misma coca cola...
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"...observaba la sombra de tu perfume... descansaba en la almohada de tu ternura..."
ResponderEliminar¿Te das cuenta de la poesía que rezuman estas letras? Y claro, luego yo me emociono completamente y me salen unos capítulos cargados de romanticismo por doquier jajajajjaja
Si es que estoy rodeada de poetas, aunque ellos ni lo sepan...
Besos y feliz domingo
¡Ala! lo sueltas y te quedas tan fresco, sí es cierto ue tu formula es tan secreta como la de la Coca no envidio a quien tenga que descubrirla.
ResponderEliminarEn ocasiones está ien pedir porque es muy posible que los demás no se den cuenta de lo que esperamos y/o necesitamos. Una buena comunicación ayuda mucho.
Le doy un sorbo a esa Coca-cola :D
Un abrazo!
Hola Akasha. La poesía sale sola, sólo me pongo a pensar en metáforas y cosas así y bueno, luego veo que queda más o menos bien y lo dejo. Así que sigo sin considerarme un poeta... aunque te lo agradezco, ya lo sabes, como siempre.
ResponderEliminarBesos y feliz vuelta a la normalidad!! ¿no?
Hola Wendy!!
ResponderEliminarLa verdad, no pretendo hacer de esa fórmula un secreto. Es bien sencillo. Pero cómo tú dices, también lo pueden pedir, que no pasa nada.
El problema con la comunicación es que no siempre nos apetece... pero bueno, intentaremos poner remedio.
Besos!!