La furia de tu suelo, la angustia de tu llama, la muerte de tu deseo, la ira de tu coraza. La rabia se mueve en vanos intentos de captar nuestra atención. La rabia nos contiene el aliento del corazón. Intenta darme la espalda, suelo amargo sin ton ni son. Hay dos tipos de personas. Las que emiten rabia sin comprender y las que comprenden la rabia sin desprender el odio. Cuando te miro, estudio escrupulósamente las facciones de tu rostro. Procuro esquivarte cuando hay rencor, para poder ponerme detrás y evaporar la ira, la envidia, el egoísmo, la rabia. Esa rabia prepotente, falsa, cubierta de agua de colores, mojada por la lluvia de los sinsabores del rechazo. Cada vez entiendo más y comprendo menos. Los sentimientos ya no se esconden, muestran su cabeza llenando de ego su cuerpo. Pero de todos tus sentimientos, ay, amiga, tú rabia... me da la espalda. Pero no te preocupes, que ya se la he devuelto, como forma más pacífica de encontrar la paz. A ver quien puede más...
La ira debe ser controlada y lo mejor para ello es darle la espalda. Enfrentarte a ella solo genera mas rabia, mas odio, mas rencor.
ResponderEliminarEs mejor no luchar contra ella sin no evitarla.
un abrazo amigo
Intentar luchar contra un volcán o un huracán enfurecido, tratar de encararlo con toda nuestra frágil humanidad y salir airoso resulta una utopía al cien por cien.
ResponderEliminarNo se trata de cobardía, sino de sensatez. Cuando todo parece desbocado uno de los dos combatientes ha de mostrar un mínimo de cordura, ¿no crees?
Un beso y espero que hayas descansado de esos terribles turnos.
[...La furia de tu suelo, la angustia de tu llama, la muerte de tu deseo, la ira de tu coraza...]
ResponderEliminarEstas primeras líneas son tremendas, abrasadoras, te lo prometo.
Siento darme cuenta de la cercanía de mi sentimiento a esta rabia que hoy se apodera de tus líneas, creando versos que estallan en la punta de un lapicero que no aprendió nunca a borrar las marcas oscuras que fue dejando... sí, siento pena y es horrible. Es un estado donde de él nada bueno se alimenta, ni nada hermoso crece dentro.
Intentemos liberarnos de ella cuanto antes, por nuestro bien, por el bien ajeno...
Besos, Manolo.
Hola sabores compartidos.
ResponderEliminarSí, por eso le doy la espalda a la ira de toda la gente, o al menos lo intento. Todo ese tipo de sentimientos al final no conducen a nada...
Abrazos!!
Hola Akasha!!
ResponderEliminarBueno, he procurado descansar, pero han pasado muy rápido y ahora otra vez noches... Afortunadamente el cuadrante de noviembre está más equilibrado y sólo tengo noches al final del mes :-)
En cuanto a ru reflexión... creo que hay mucha gente que todavía no sabe lo que es la cordura. Con eso lo digo todo.
Gracias por comentar. Besos y feliz finde!! Yo me haré pasar por un búho... :-P
Hola Mayte.
ResponderEliminarA veces es ira, a veces, rabia, a veces, impotencia. Como bien dices, son sentimientos fuertemente unidos y que cuando se apoderan de nosotros no sabemos ni como vamos a reaccionar.
Todavía sigue siendo triste que nuestro primer obstáculo es aquél por el cual luchamos, de corazón. Es la raíz de la rabia. Y a partir de la rabia, viene todo lo demás.
Espero que mis palabras no te entristezcan, ni a ti ni a nadie. Pero como bien sabes, cuando sientes cosas, escribes sus reflejos.
Un beso fuerte, amiga.