Desolación. Esperanza perdida. Llantos de pasión. Herencia engreída. Nubes tras el sol, escamas malheridas, caprichos en flor, alma complacida. La lluvia envuelve los pétalos de la vida, mientras ésta esconde sus colores a la lluvia malnacida. Malcriada. Como en todo cuento de hadas, o tienes todo, o no tienes nada. Con la doble negación, absurda en los sentidos, plena agonía colmada de dolor. Porque no existen mil cielos que me lleven hacia tí, porque no existen mil infiernos que nos queden por vivir, porque no te doy mil besos si sé contar hasta cien mil, porque a veces tus deseos no se parecen a mi. Pero eso ya no importa. No hay estrella que brille sin luz. Me lo dijiste tú. No hay luz que no llegue a las estrellas. Me lo dijeran ellas. Y no hay amor sin comprensión. Me lo dijo el corazón, ese que hoy mismo, se llena de desolación...
sábado, 22 de octubre de 2011
DESOLACIÓN
Desolación. Esperanza perdida. Llantos de pasión. Herencia engreída. Nubes tras el sol, escamas malheridas, caprichos en flor, alma complacida. La lluvia envuelve los pétalos de la vida, mientras ésta esconde sus colores a la lluvia malnacida. Malcriada. Como en todo cuento de hadas, o tienes todo, o no tienes nada. Con la doble negación, absurda en los sentidos, plena agonía colmada de dolor. Porque no existen mil cielos que me lleven hacia tí, porque no existen mil infiernos que nos queden por vivir, porque no te doy mil besos si sé contar hasta cien mil, porque a veces tus deseos no se parecen a mi. Pero eso ya no importa. No hay estrella que brille sin luz. Me lo dijiste tú. No hay luz que no llegue a las estrellas. Me lo dijeran ellas. Y no hay amor sin comprensión. Me lo dijo el corazón, ese que hoy mismo, se llena de desolación...
Desolación. Esperanza perdida. Llantos de pasión. Herencia engreída. Nubes tras el sol, escamas malheridas, caprichos en flor, alma complacida. La lluvia envuelve los pétalos de la vida, mientras ésta esconde sus colores a la lluvia malnacida. Malcriada. Como en todo cuento de hadas, o tienes todo, o no tienes nada. Con la doble negación, absurda en los sentidos, plena agonía colmada de dolor. Porque no existen mil cielos que me lleven hacia tí, porque no existen mil infiernos que nos queden por vivir, porque no te doy mil besos si sé contar hasta cien mil, porque a veces tus deseos no se parecen a mi. Pero eso ya no importa. No hay estrella que brille sin luz. Me lo dijiste tú. No hay luz que no llegue a las estrellas. Me lo dijeran ellas. Y no hay amor sin comprensión. Me lo dijo el corazón, ese que hoy mismo, se llena de desolación...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hola Manolo
ResponderEliminarTus palabras me han recordado "Llanto de pasión" de El Último de la Fila. Una gran canción, aunque bastante triste. Tampoco una cosa tiene por qué quitar la otra, lo sé.
De esa foto me gusta la planta, o copa de árbol, que aparece sobre uno de los tejados. El lugar parece abandonado, por lo que ver cómo la naturaleza vuelve a recuperar lo que es suyo, es como un signo de esperanza dentro de esa desolación.
Un fuerte abrazo!
La lluvia malnacida la tenemos sobre nuestras cabezas a diario y parece no importarnos mientras que cuando caen dos gotas de la buena de la necesaria enseguida nos molestamos. Es eso lo que pasa en el corazón? no nos gusta lo natural? me llena de desolación solo pensar el daño que nos hacen sin darnos cuenta. Buen texto amigo.
ResponderEliminarLa fotografia muy curiosa, jeej mira que salir un arbol en el tejado.... que cosas.
un abrazo
He de decirte que encontré muy buenos versos, Manolo en este poema. Sé que te muestras reacio cuando alguien los alaba, pero en este caso admito que he visto una construcción muy diferente de la que sueles hacer cuando versas.
ResponderEliminarLa emoción es evidente, intensa, y esta vez sí, encontraste la armonía que echaba en falta.
Desolación es una palabra completamente devastadora de por sí, muy triste la verdad, ojalá y no la sientas nunca.
Besos.
Wow, Manolo, creo que no soy la única a la que el Otoño está haciendo mella en su corazón... en tu caso si te inspira semejantes versos bienvenido sea ¿no?
ResponderEliminar"... porque no te doy mil besos si sé contar hasta cien mil..."
No sé, me ha encantado de principio a fin, pese al aire desolado de sus letras (será que tal vez a esta que lee le gustan los ambientes desolados y melancólicos, es su salsa.)
Un beso y buena semana.
Bueno.. parece triste... a veces solo el tiempo hace que las gotas de lluvia sean no ácida, sino feliz.
ResponderEliminarUn saludo
Hola Sinfin!!
ResponderEliminarNo me gusta demasiado el Último de la Fila... aunque bueno, tampoco está mal. La foto es de las minas abandonadas de Linares, como tantas otras fotos que suelo colocar.
Me alegra leerte en estos ratos escasos de tiempo.
Un abrazo!!
Hola orthos, gracias por tus palabras. No tengo tiempo ni para fijarme en lo del árbol encima del tejado... si no me lo llegáis a decir...
ResponderEliminarEn fin, me queda un último achuchón para terminar una cosilla que tengo entre manos e intentar volver un poco a la normalidad.
Un abrazo.
Hola Mayte.
ResponderEliminarNo te reconocí en esa foto... aunque sí en tus palabras, como suele ser habitual, elogios que yo no merezco, pero que no voy a poner tampoco en duda viviendo de vosotros. Sí, tienes razón, ya sabes que me gusta ser humilde, y cuando escribo, es con sentimiento.
Quizá por eso salen así... no digo bien o mal, simplemente así. Gracias por estar ahí. Me alegro de leerte.
Besos!!
Hola Akasha!!
ResponderEliminarBueno, es evidente que la nostalgia me envuelve cuando escribo mis mejores letras, según vuestras opiniones, que son a las que me debo.
Me alegro que te guste, una vez más, mi semi-poesía, por lo menos no estoy fracasando en mis intentos.
Besos y gracias por estar ahí!!
Hola Estrella.
ResponderEliminarGracias también a ti por tu visita y por tus palabras. Como digo, ahora es que ando escaso de tiempo, pero espero poder dedicaros mas tiempo en breve con más escritos y visitas a vuestros sitios.
Saludos!!