Con el alma flotando en las estrellas de mi corazón, con el tierno enlace que despereza esta unión, con los palos de ciego de mi invisible bastón, con las sabias palabras que me quitan la razón... sigo mirando el horizonte, sin saber la certeza de mi ser, buscando ráfagas de viento, sin mirar el sol ni las nubes del revés. Sin dirección, sin apuntar, con la luna mostrando escote, seducción de ultramar, alas de llano húmedo, siniestro al naufragar, lamento de niño chico, sonrisas de calamar. Siento una desazón cuando pienso en el futuro que nos queda por llegar, mirando futuros meses, pensando en el pesar que nos queda de los días que vamos dejando atrás. Volvemos a la rutina de quien se acostumbra a caminar dando palos de ciego sorteando obstáculos con una facilidad pasmosa, que asombra incluso a los ciegos de verdad. Y es que no nos queda otra. Avanzar con paso firme sin dejar de otear el semblante de quien no nos deja de observar ni siquiera por azar. Que los días se suceden y no sabemos donde vamos a parar. Por eso damos palos de ciego. Para que, al menos, el destino no nos pueda sorprender, dejando en el camono tantas cosas por aprender...
viernes, 2 de diciembre de 2011
PALOS DE CIEGO
Con el alma flotando en las estrellas de mi corazón, con el tierno enlace que despereza esta unión, con los palos de ciego de mi invisible bastón, con las sabias palabras que me quitan la razón... sigo mirando el horizonte, sin saber la certeza de mi ser, buscando ráfagas de viento, sin mirar el sol ni las nubes del revés. Sin dirección, sin apuntar, con la luna mostrando escote, seducción de ultramar, alas de llano húmedo, siniestro al naufragar, lamento de niño chico, sonrisas de calamar. Siento una desazón cuando pienso en el futuro que nos queda por llegar, mirando futuros meses, pensando en el pesar que nos queda de los días que vamos dejando atrás. Volvemos a la rutina de quien se acostumbra a caminar dando palos de ciego sorteando obstáculos con una facilidad pasmosa, que asombra incluso a los ciegos de verdad. Y es que no nos queda otra. Avanzar con paso firme sin dejar de otear el semblante de quien no nos deja de observar ni siquiera por azar. Que los días se suceden y no sabemos donde vamos a parar. Por eso damos palos de ciego. Para que, al menos, el destino no nos pueda sorprender, dejando en el camono tantas cosas por aprender...
Con el alma flotando en las estrellas de mi corazón, con el tierno enlace que despereza esta unión, con los palos de ciego de mi invisible bastón, con las sabias palabras que me quitan la razón... sigo mirando el horizonte, sin saber la certeza de mi ser, buscando ráfagas de viento, sin mirar el sol ni las nubes del revés. Sin dirección, sin apuntar, con la luna mostrando escote, seducción de ultramar, alas de llano húmedo, siniestro al naufragar, lamento de niño chico, sonrisas de calamar. Siento una desazón cuando pienso en el futuro que nos queda por llegar, mirando futuros meses, pensando en el pesar que nos queda de los días que vamos dejando atrás. Volvemos a la rutina de quien se acostumbra a caminar dando palos de ciego sorteando obstáculos con una facilidad pasmosa, que asombra incluso a los ciegos de verdad. Y es que no nos queda otra. Avanzar con paso firme sin dejar de otear el semblante de quien no nos deja de observar ni siquiera por azar. Que los días se suceden y no sabemos donde vamos a parar. Por eso damos palos de ciego. Para que, al menos, el destino no nos pueda sorprender, dejando en el camono tantas cosas por aprender...
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Alguien dijo una vez: "El pasado ha huído, lo que esperas está ausente, lejano, desconocido... pero el presente es tuyo." Nadie sabe lo que nos depara el futuro por lo que los palos de ciego son dados a diestro y siniestro por doquier y por parte de todos. Lo mejor que podemos hacer es mirar el futuro con esperanza, cambiar lo que podamos cambiar y resignarnos con lo que no esté en nuestra mano ni siquiera variar en lo más mínimo.
ResponderEliminarUn beso y buen finde.
Que fotografía más original, la fuente aparece desenfocada en primer plano y se ve con nitidez la pared de atrás, a veces las cosas se ven igual borrosas, desenfocadas, el futuro es incierto no sabemos lo que pasará, no está en nuestra mano así que mejor atender al presente que ya es mucho.
ResponderEliminarBesos.
Nunca puedes saber como te va a ir la vida, a veces tomamos decisiones rapidas pensando que seran acertadas y luego viene la caida o te estrellas simplemente. Asi es la vida, lo que hoy es hermoso mañana puede ser desastroso.
ResponderEliminarBonita foto Manolo
un abrazo amigo
Feliz diciembre!!
ResponderEliminarBueno, agradezco vuestros comentarios. Tengo un inicio de mes un poco complicado, pero tengo vacaciones el día 15, unos 12 días, aprovecharemos para volver a pasar un rato con vosotros y vuestros blogs durante esos días.
Gracias, como siempre, por vuestras visitas.
Besos y abrazos!!