Realmente, tengo un problema con esta palabra o término. Cuando estoy realmente tranquilo, sin apenas síntomas de mi "moderada" ansiedad, parece que sea mi propia mente la que la busque, sin necesidad alguna. Casi nunca consigo realizar todo lo que me propongo para un día en concreto. Quiero apreciar las oportunidades que la vida me da, pero me cuesta la misma vida. Me propuse dejar perfilado hoy un relato que tengo pensado escribir y presentar a un concurso, pero la realidad es que apenas pude empezarlo, a pesar de que encontré cierta inspiración en un momento del día que pude tener concentración mientras me dedicaba a otras cosas. Este es un pequeño ejemplo de lo que me suele pasar constantemente. Sé, y soy consciente de ello, que seguramente estoy en una época de mi vida en la cual tengo demasiadas cosas en la cabeza, pero eso no es óbice para intentar hacer todo lo que me propongo con determinada relajación, pues para eso lo planifico dándome bastante tiempo de margen. Por eso me cuesta tanto conseguir las cosas; porque siempre voy cuesta arriba. El problema vendrá cuando llegue el día en que deje de conseguirlas...
Que pasada de fotos ! la de este post y los dos anteriores ! espectacular esa Sierra Nevada en la panorámica y en la de la técnica aplicada, parecen cuadros.
ResponderEliminarEn cuanto a la ansiedad no se que decirte, espero que pronto puedas torearla y deje de ser un problema, ánimo con el relato !
¡Besos!
Hola BET. Gracias por lo de las fotos. Tampoco es para tanto, en ello estamos, en fase de experimentación y aprendizaje.
ResponderEliminarLa ansiedad lleva siendo un problema muchos años de mi vida... en fin, dejémoslo ahí.
Besos!!
Hola Manolo.
ResponderEliminar!Ay, la ansiedad! querido amigo, esa fiel y estúpida sensación que deriva de una mente que siempre anda en activo y de un alma sensible; és la combinación perfecta para que venga a nosotros...
Yo con el tiempo he sabido controlarla, menos en los momentos de tensión, o cuando estoy en el extremo nervioso y difícil en el que me hallo cuando alguien me pone al límite.
Es cierto, que cuando tienes demasiadas cosas pendientes por hacer, cuando vás a contracorriente y a destiempo, cuando más fácil resulta que aparezca esos momentos de estrés y ansiedad.
Yo, mayormente, en esas circustancias,lo que trato es de controlar la respiración, inhalar profundamente el aire hasta llenar mis pulmones, contar hasta veinte y exhalarlo después, si aún y así sigo "nerviosa", me tomo una tila, una pastilla y haga lo que esté haciendo lo dejo y salgo a la calle a pasear a solas.
Hay que tener paciencia, que se que la tienes, pero, sólo la gente inteligente, que se que tú lo eres, sabrá combatir con esos momentos de angustia, estoy convencida.
Te mando un abrazo; tranquilo y sereno.
Hola May!! Te noto de mejor humor... la ansiedad me acompaña de hace muchos años. Yo también tengo todos esos trucos, que intento poner en práctica, pero cuando da, pues da, y no creo que se puedan hacer muchas cosas.
ResponderEliminarPaciencia tengo, si no, no estaría donde estoy, jejeje... te lo aseguro.
Otro abrazo para ti!!